Seguro que esto te lo han repetido mil y una veces, pues bien, nosotros no vamos a ser menos. Como ya sabrás el tabaco es nocivo para la salud, lo que seguramente no sepas, es que no solo afecta a tus pulmones. La Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), ha realizado un estudio que demuestra que el consumo de tabaco en etapas comprendidas entre la adolescencia y la adultez afecta al correcto desarrollo físico del cerebro en los jóvenes.
La calve reside en la corteza insular o ínsula, una porción del cerebro ubicada en la superficie lateral, que separa las cortezas temporal y parietal inferior. Se sabe que esta parte del cerebro juega una parte fundamental en las emociones, sentimientos y la toma de decisiones. Pues bien, según el estudio, esta parte del cerebro tiene un papel clave en la adicción y dependencia del tabaco.
La Universidad descubrió que los participantes (de edades comprendidas entre los 16 y 22 años) que fumaban habitualmente, disponían de una corteza insular mucho más fina que la de los no fumadores. Esto no solo podría afectar a sentimientos tan importantes como el dolor, el miedo, la felicidad o la tristeza, sino que podría ser la explicación de la adicción al tabaco que posteriormente muestran numerosos adultos.
Otro estudio científico que se publicó en la revista Nature, mantiene que el tabaco es capaz de deteriorar la corteza cerebral a largo plazo. Este proceso ya se produce de forma natural con el envejecimiento, pero el uso prolongado de la nicotina lo agrava sustancialmente.
En dicho estudio, realizado sobre 504 fumadores (se segmentaron por años de consumo, y también había exfumadores.) se constató, no solo que el tabaco afecta a la estructura del cerebro, sino también, que el abandono del hábito de fumar permite una regeneración de la corteza cerebral. Así es que como se suele decir, más vale tarde que nunca. Aún estás a tiempo.
… Y NO SOLO EL TABACO.
Además del tabaco, durante los últimos años, se ha extendido de manera notable el consumo de otra droga catalogada como ‘blanda’, la marihuana. Al igual que como te acabamos de explicar con el tabaco, el consumo habitual de marihuana repercute de forma nociva en tu cerebro.
De acuerdo con el estudio realizado por el Hospital Norhwestern Memorial junto con la Universidad de Northwestern, han desvelado que los jóvenes que fuman marihuana de forma habitual durante largos periodos de tiempo tienden a desarrollar problemas de memoria.
Tal es así, que los sujetos del estudio presentaron importantes alteraciones físicas en el hipocampo, región determinante para la formación de recuerdos a largo plazo. Estos efectos persisten incluso dos años después de haber abandonado el consumo. El consumo de esta droga también afecta a la resolución de problemas cotidianos e incrementa el riesgo de sufrir esquizofrenia.
En UniHcos promovemos un estilo de vida saludable, por ello estamos en la obligación de, cuanto menos, advertirte de los efectos nocivos de las sustancias que consumes. Te sugerimos que te abstengas de este consumo, pero solo tú decides. Ánimo, si quieres, puedes.
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